La meditación te ayuda a tomar mejores decisiones
Cada vez que meditamos, estamos entrenando la consciencia. ¡Te contamos todo en este blog!
¿Qué significa realmente tomar “consciencia”? Esta es una pregunta profunda. Tomar consciencia implica adquirir un mayor entendimiento y reconocimiento de aspectos específicos de la vida.
Realizar este ejercicio no es sencillo, principalmente porque a la mente no entrenada le gusta aferrarse a cualquier objeto o cosa que ve, o cualquier pensamiento, emoción o sensación que surja; en definitiva, todo lo que percibimos.
Cuando nos alejamos de todo esto (sin ideas, juicios, diálogo interno o la necesidad de definir) entramos en un espacio donde simplemente observamos cómo se comporta la mente, y donde experimentamos el momento presente... sin pensar, sin distracciones.
Entonces, es posible crear estos estados de calma mental y tranquilidad tomando consciencia de nuestros propios pensamientos, a esto lo llamamos metacognición. Y lo logramos realizando una práctica meditativa a diario.
Cuando meditamos desarrollamos una conciencia estable a lo largo del tiempo, en la medida en que no nos dejemos atrapar ni abrumar tan fácilmente por nuestros pensamientos y emociones.
La consciencia nos brinda una perspectiva completamente nueva y, a través de esta perspectiva, obtenemos una comprensión completamente nueva.
Al practicar mindfulness, sin identificarnos con pensamientos rumiantes, conseguimos crear una amplitud mental que nos libera del impacto negativo de estos.
¿Cómo se practica la meditación para el desarrollo de la Consciencia Plena?
La meditación nos ayuda a entrenar en dos tipos de conciencia: conciencia enfocada a un objeto y conciencia sin un objeto.
Cuando nos referimos a la conciencia enfocada a un objeto, centramos nuestra atención en la respiración, por ejemplo; cada vez que la mente divaga, simplemente regresamos la atención a la respiración y nuestra conciencia se restablece. La respiración actúa como nuestro ancla en el momento presente.
La conciencia sin un objeto es un poco más difícil, y probablemente para meditadores más experimentados, porque le pedimos a nuestra mente que descanse en la conciencia misma, sin centrarse en nada. Estamos simplemente presentes con el silencio.
Al practicar la meditación, podemos entrenar la mente para ampliar la cantidad de tiempo que puede descansar en ese espacio silente..
Y ¿vale la pena todo este esfuerzo? Sí, porque el desarrollo de la Consciencia Plena nos regala una mejor comprensión de por qué pensamos y sentimos de la manera que lo hacemos, permite más opciones en nuestras respuestas y acciones, lo que a su vez conduce a una reducción del estrés, una mayor felicidad, mejores relaciones y una existencia más rica en general.
Según Eurich, "Existe evidencia científica sólida de que las personas que se conocen a sí mismas y cómo las ven los demás son más felices". Puedes conocer más en el siguiente artículo científico: Resiliencia y estrés como mediadores en la relación entre mindfulness y felicidad.
Este autoconocimiento, nos lleva a tomar decisiones más inteligentes que impacten positivamente nuestras vidas y nuestro mundo.
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¡Gracias por leernos!
¡Hasta pronto!
Mindful Science y equipo.
Texto: Nayla Funes
Corrector literario: Nayla Funes y Nerina Crocce para Mindful Science.
Fuente: Resiliencia y estrés como mediadores en la relación entre mindfulness y felicidad.
Badri Bajaj, Bassam Khoury, Santoshi Sengupta.Librería de Medicina Nacional. https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/ 2022. USA.
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