El poder de la Atención Plena: utiliza tu cuerpo como un aliado
En este artículo, exploraremos cómo puedes convertir tu cuerpo en un aliado en la práctica de la Atención Plena y presentaremos algunos ejercicios sencillos y efectivos para empezar.
Somos concientes que nuestro día a día está repleto de distracciones y actividades que hacen que encontrar un momento de serenidad y pausa parezca una tarea muy difícil.
Estar constantemente abrumados tiene un impacto significativo en nuestro cuerpo. La presión de cumplir con múltiples responsabilidades, plazos y tareas puede elevar los niveles de estrés y ansiedad. Esto puede manifestarse físicamente a través de dolores de cabeza, problemas digestivos y trastornos del sueño, mientras que mentalmente puede causar fatiga, irritabilidad y una disminución en la capacidad de concentración.
Incorporar la Atención Plena en nuestra rutina diaria puede ser una herramienta poderosa para contrarrestar los efectos negativos de una vida acelerada. Y el cuerpo es un ancla natural para llevar adelante esta práctica, nos permite aterrizar en el momento presente mediante la observación de nuestras sensaciones físicas.
“Los seres humanos tenemos dos maneras de conocer la experiencia: pensando en ella, y sintiéndola directamente con el cuerpo. Aprender a habitar nuestra experiencia sensorial visceral proporciona otra manera de conectar y una perspectiva diferente a la hora de relacionarnos con los pensamientos. El mindfulness, pues, nos brinda una forma directa e intuitiva de conocer la experiencia.”
- Rebecca Crane
Podemos cultivar una mayor conciencia de nuestro estado interno y externo para obtener muchos beneficios, como:
- Reducción del estrés. Está comprobado que, al prácticar mindfulness, se reduce la producción de cortisol, la hormona del estrés, y promueve un estado de relajación.
- Mejora de la salud física. Se ha evidenciado mejoras en la función cardiovascular, reducir la presión arterial y fortalecer el sistema inmunológico.
- Mayor claridad mental. La Atención Plena aumenta la concentración y la capacidad de tomar decisiones claras y equilibradas.
- Conexión con el cuerpo. Desarrollar una relación más profunda, consciente y verdadera con el cuerpo puede llevar a una mayor autocompasión y cuidado personal.
Desde Mindful Science queremos recomendarte una práctica en la que puedes utilizar tu cuerpo como aliado: Mindful Fitness.
¿Y de qué se trata? Pues bien, nuestros profesores Silvana y Wilson te ofrecen una serie de actividades combinan el movimiento físico con la Atención Plena que, con constancia, pueden aumentar tu flexibilidad, movilidad, fuerza y calma mental.
Las prácticas de movimiento consciente son sencillas, seguras y amenos de realizar. Puedes ejercitarte en la comodidad de tu casa, en algún parque al aire libre sol@ o con un grupo de amigos.
Y ¿cómo práctico Mindful Fitness? Aquí te compartimos 5 pasos:
- Elige una buena postura. Trata de mantener tu columna erguida o neutra;
- Relaja tus músculos. Haz un breve escaneo corporal para eliminar, poco a poco, la tensión corporal.
- Respiración profunda que sea lenta y controlada. Inhala profundamente y exhala por tu boca suavemente abierta.
- Realiza los movimientos sincronizados con tu respiración.
- Repite los pasos anteriores, ahora tomando conciencia de la respiración y de las sensaciones corporales a lo largo de la práctica.
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El cuerpo no es solo un vehículo que nos lleva de un lugar a otro; es una herramienta poderosa que puede ayudarnos a encontrar paz y equilibrio en nuestra vida diaria.
Recuerda, la clave es la práctica regular. ¡Tu cuerpo y mente te lo agradecerán!
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¡Hasta pronto!
Mindful Science y equipo
Texto: Nayla Funes - Psiconeuroeducador
Corrección literaria: Nerina Crocce y Lucia Ibañez para Mindful Science.
Disfruta la calma y paz que mereces.
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